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SECUESTRO EXPRESS (2005)

Director
Jonathan Jakubowicz
Guión
Jonathan Jakubowicz

Cast:
Mía Maestro .... Carla
Rubén Blades .... Padre de Carla
Carlos Julio Molina .... Trece
Pedro Perez .... Budu
Carlos Madera .... Niga
Jean Paul Leroux .... Martin

Duración: Argentina:90 min / USA:86 min
País: Venezuela
Lenguaje: Español

El que Secuestro Express este ambientada en una Caracas decadente, donde el simplemente circular es exponerse a un crimen, en donde la noche y el día parecen unidos por un vértigo solo atribuible al miedo, en donde la velocidad es sinónimo de estar seguro, en donde cada día hay más trincheras para separar a unos de otros, no es casualidad, pero tampoco patrimonio exclusivo, podría suceder en cualquier lugar de este polvoriento villorio llamado américa latina: Rio, Bueno Aires, Lima, Bogotá. El secuestro express ya ha dejado de ser una palabreja, es para algunos simplemente una nueva forma de hacer negocios.

Y eso lo ha entendido a la perfección Jonathan Jakubowicz, ha dotado a los caracteres de su película, de locura, la ambición, y miedo, en dosis suficientes para que el espectador no lo olvide por un tiempo, nada de lo que sucede es por que unos odien gratuitamente a otros, son negocios, son respuestas que no quieren ser oidas, se trata de la descomposición social, del estado, del país, se podrá seguir hallando culpables donde se quiera, pero seguirá sucediendo, una y otra vez, y parecemos incapaces de detenerlos.

Por eso Jakubowicz, ha decidido contar su película desde la óptica de los secuestradores, desde su ritual íntimo, desde sus frustraciones y su perversidad. Por eso parecen dueños de la ciudad, de sus signos y de su lenguaje, lo que ellos expresan, es sólo parte de una corte babélica que nadie ha querido entender. Parece una apuesta arriesgada, un alma sensible lo acusará de apología de la violencia, y sin embargo eso no es cierto, se ha efectuado una elección artísitica, una apuesta arriesgada, pero exitosa.

La película no es sino la crónica de un secuestro, cuando los mecanismos secretos comienzan a engranarse, la reunión de los participantes, la búsqueda y elección de la víctima y el secuestro mismo, el vértigo por conseguir la mayor cantidad de dinero, en el menor tiempo posible, las llamadas a los seres queridos, y el paseo por una ciudad que amanece, silente, complice quizás, por la que circulan a gran velocidad, todos reunidos en un vehículo, dos mundos tocándose por un rato, reconociéndose en el otro.

Luego la cámara se regodeará en las peripecias de los secuestradores, en un cajero automático su secuestrado será a su vez asaltado por otro desesperado salido de la nada, en un barrio de clase media sufrirán el robo de la camioneta cuatro por cuatro de los secuestrados, y así. En algún momento parecerá que existe complicidad, que algo más que los roles que les ha asignado el destino los une. Y luego, la muerte violenta. El rescate. La moraleja en una ciudad corrupta en quien menos debes confiar es en la policía. Y todo esto sucede sin que las imagenes nos den tregua, suceden frente a nosotros a una velocidad que no habiamos visto en el cine latinoamericano más reciente, la velocidad de las cosas, parecía que sólo podía ser captada por grandes superproducciones, no por una película de bajo presupuesto rodada en el 2002 por un puñado de desconocidos.

Secuestro Express es un gran acierto. En la forma como se han servido de la ciudad, en la dinámica que le han impuesto al film, y en especial por la elección de los actores. Mia Maestro nos encandila y nos conmueve, y por un rato pareciera alguien que conocimos, nuestra vecina de al lado; Ruben Blades tiene un pequeño papel, no hay mucho decir, se muestra contenido, frágil, no desentona, tampoco destaca, sólo hace su trabajo de la manera más profesional, dice sus líneas, y listo.

La película fue estrenada el año pasado, y para quienes la han visto, ha sido una sorpresa la actuación de budu, nigga y trece, raperos venezolanos, conocidos por el proyecto Vagos y Maleantes, quienes dan vida a tres personajes entrañables, disimiles y de un grado de locura distinto, pero en el que reconoceremos, todo lo excecrable así como todo lo humano que puede estar contenido en una sola persona.

Posted by No future