Little miss sunshine: cuando los perdedores dejan de serlo
1 Comments Published by Anónimo on 15.7.07 at 1:17 a. m..El encanto de los perdedores nunca es fàcil de retratar, menos aún conseguir que en vez de conmiseración nos despierten simpatía; muchisimo más arduo aún resulta que tras exponer sus miserias podamos terminar sintiendo una identificaciòn con cada uno de los personajes de una familia disfuncional: donde el Abuelo es adicto a las drogas, el padre ha abrazado la fe de la autoayuda, el tio sea un especialista en Proust con tendencias suicidas, el hermano un adolescente semi catatònico que ha hecho un juramento de silencio y que la hermana menor no tenga aptitud alguna, màs allà de su desenfado para encajar en el estereotipo de los concursos de belleza, y que pese a ello, esa sea su gran pasiòn: entre otros, esos son los elementos de esta encantadora comedia que el año pasado sorprendiò a la mayorìa, con algunas actuaciones notables (Alan Arkin ganò el Oscar como actor secundario) y por un guiòn escrito con suma justeza.
Little Miss Sunshine esta planteada como la crònica de un viaje que toda una familia hace en una vieja camioneta Volskwagen para que la hija menor, una adorable Abigail Breslin, compita en un concurso de belleza, que al inicio parece ser el signo del cambio, el acceso al èxito en un mundo de perdedores y ganadores; y que hacia el final se revela cmo signo de ruptura y liberaciòn, como el mejor mecanismo para enfrentar sus diferencias y aceptar los resultados.
Destaca en esta comedia, la manera en que se enfrentan los retos dramàticos que el guiòn exige, allì una acertada elecciòn de actores resulta ser clave. Eso explica la presencia de un Steve Carell distinto, sumamente contenido, y demostrando que lo suyo no sòlo es la comedia fìsica, o las excentricidades gestuales, su sola presencia es perturbadora, y quizàs el eje de las situaciones màs còmicas de la pelìcula.
Posted by No future
Etiquetas: Alan Arkin, Litte miss sunshine, Steve Carell Abigail Breslin
Un tema interesante, el del encanto de los perdedores.